martes, 25 de marzo de 2008

Nada es tan importante

O más bien: nada es tan importante, como nos lo parece cuando pensamos en ello. Esta reflexión es de Kahneman.
La verdad es que es interesante pensar que la importancia que le damos a las cosas depende de que le estemos dando importancia. Como dice mi hijo: "No me acuerdo, porque cuando me muevo se me olvidan las cosas".
Con esa inmensa reflexión me dice: "Eso de lo que hablas fue importante, pero ya no, ahora estoy a lo que ahora es importante".
Y yo aquí escribiendo un blog.

2 comentarios:

José Manuel López-Valverde dijo...

Hay cosas que son objetiva y permanentemente importantes, con independencia de que pensemos en ellas o de que les asignemos un mayor o menor grado de importancia: la familia, por ejemplo. Y son esas cosas por las que hay que luchar y en las que merece la pena invertir tiempo y esfuerzo.

Josepe dijo...

Desde luego estoy contigo, hay cosas importantes, pero la mayor parte de las cosas que nos hacen perder el tiempo y sobre todo la paz no son tan importantes como nos creemos cuando pensamos sobre ellas.

Autopresentación Versada

Después de gran reflexión de un modo un poco espeso, según el siguiente verso, defino mi posición. Soy Conservador de sentimiento, Y Liberal por afición, Soy Cristiano de nacimiento Y también de convicción. Define mi pensamiento el Ecologismo de verdad, Más mi ser es ante todo Disidente y Radical. Funcionario, blavero, Profesor de universidad, Padre de familia, fallero, Ingeniero Industrial, Valencianista sincero, Y muchas otras cosas más, Que explicaré con esmero, Expresan como soy, Pero ay! sólo por hoy, que el mañana es traicionero. Y si eso es ser azul, marino, o azul cielo Como valor que ser quiero expresado en RGB yo me pido el $0000ED Si todo lo expresado deja a las claras dicho, que soy demasiado diestro pues que me tiren al bicho pues soy un gran torero. No sé si eso es estar arriba o por el contrario es ser abajo, si es ser de los que cantan o de los que tocan el badajo. Tampoco sé si estoy delante O voy en el furgón de cola, si tengo mucho talante, o si soy una juanola. Mal le haya, No soy notario, Ni tampoco congresista, Y no fui seminarista Más tampoco perdulario. ¿Será que soy reaccionario? ¿No sería estrafalario decir que soy progresista?